Seguimos abriendo las puertas del blog a conocimiento y experiencia en materia de seguridad del paciente. En esta ocasión tenemos el honor de contar con la aportación de SENSAR, la seguridad de los pacientes por excelencia en la especialidad de anestesia. Mi agradecimiento personal a la Dra. Sonsoles Martín, alias en la red @sonsomar quién ha tenido la deferencia de hacerme llegar el texto que publico a continuación. Siempre he defendido que la seguridad de los pacientes es "cosa" de profesionales y bien que se han aplicado a la tarea los anestesistas desde hace tiempo. La anestesiología, como especialidad dónde se han de adoptar decisiones rápidas en pacientes frecuentemente inconscientes, ha debido extremar todas las medidas que lleven a disminuir los errores técnicos humanos y sus consecuencias. La protocolización de la vigilancia y de los cuidados ha sido un modelo a imitar por estos especialistas. La página web de SENSAR (notificación de incidentes anestésicos) es muy interesante y debe ser visitada por todos aquellos que tenemos interés en incrementar la seguridad de los pacientes. Mi agradecimiento a la Dra. Martín cuyo blog personal "hay otros mundos" es de visita reconfortante y por ende, recomendable.
La anestesia es la
especialidad médica que tradicionalmente ha liderado los avances en seguridad del paciente. Así
lo reconoció el informe “To err is human” que el Institute of Medicine
norteamericano publicó a finales de 1999 y que puede considerarse el “big bang”
en seguridad del paciente. Las reducciones en la mortalidad relacionada con la
anestesia que se han producido en las últimas décadas han convertido nuestra
especialidad en aquélla que está más cerca de conseguir el objetivo de calidad
Seis Sigma: en la década de los noventa el fabricante de teléfonos
móviles Motorola estableció como objetivo de calidad en su proceso de
fabricación una cifra de defectos que fuese inferior a seis desviaciones
estándar o, expresado de otra forma, una cifra inferior a 3,4
defectos por millón de oportunidades.
En el monográfico del British Medical Journal dedicado a los errores médicos y que fue publicado en el año 2000, David Gaba, un anestesista y piloto de aviación californiano que ha trabajado bastante en el campo de la seguridad, los incidentes y los simuladores, expresaba cuáles eran a su juicio las razones por las que la anestesia había conseguido reducir su tasa de mortalidad. Una de las primeras razones señaladas era la utilización de determinadas técnicas (incidente crítico, ASA Closed Claims Study), muy distintas de las tradicionales, y que habrían enmarcado el problema de la seguridad durante la anestesia. Además, otras razones esgrimidas eran la mejora en el equipamiento, la utilización de estándares de monitorización y guías clínicas.
La seguridad del paciente es un componente esencial de la gestión de riesgo, la dirección clínica y la mejoría de la calidad[i]. Cada vez más se reconoce que la cultura de seguridad es una estrategia importante –tal vez un precursor necesario– para mejorar la seguridad del paciente[ii] [iii],[iv]. Este cambio cultural supone un proceso liderado de aprendizaje colectivo[v],[vi] que, desterrando el concepto de culpa y adoptando un enfoque centrado en el sistema y no en el individuo, descansa sobre la comprensión de la causa de los incidentes. El modelo propuesto por Reason ha alcanzado una gran difusión[vii]. Reason afirma que el ser humano es falible y los errores que comete son esperables. Sin embargo, los errores humanos deben ser vistos como consecuencias, y no como causas, pues tienen su origen en factores existentes en el sistema.
La cultura de seguridad necesita un sistema de información que recoja, analice y difunda la información relacionada con los incidentes. Esta cultura informada necesita a su vez de cuatro subculturas: una cultura de comunicación, en la que el personal perciba un clima de confianza para comunicar los incidentes; una cultura justa, en la que esté claramente diferenciada la conducta inaceptable y que no va a ser tolerada y la conducta que, aunque errónea, es comprensible y aceptada en un sistema de comunicación y análisis[viii]; una cultura flexible, en la que se produzcan alteraciones de la estructura jerárquica para adaptarse a situaciones de riesgo; y una cultura de aprendizaje, caracterizada por el deseo de extraer conclusiones del sistema de información y la disposición a adoptar las reformas necesarias por importantes que sean.
En el monográfico del British Medical Journal dedicado a los errores médicos y que fue publicado en el año 2000, David Gaba, un anestesista y piloto de aviación californiano que ha trabajado bastante en el campo de la seguridad, los incidentes y los simuladores, expresaba cuáles eran a su juicio las razones por las que la anestesia había conseguido reducir su tasa de mortalidad. Una de las primeras razones señaladas era la utilización de determinadas técnicas (incidente crítico, ASA Closed Claims Study), muy distintas de las tradicionales, y que habrían enmarcado el problema de la seguridad durante la anestesia. Además, otras razones esgrimidas eran la mejora en el equipamiento, la utilización de estándares de monitorización y guías clínicas.
La seguridad del paciente es un componente esencial de la gestión de riesgo, la dirección clínica y la mejoría de la calidad[i]. Cada vez más se reconoce que la cultura de seguridad es una estrategia importante –tal vez un precursor necesario– para mejorar la seguridad del paciente[ii] [iii],[iv]. Este cambio cultural supone un proceso liderado de aprendizaje colectivo[v],[vi] que, desterrando el concepto de culpa y adoptando un enfoque centrado en el sistema y no en el individuo, descansa sobre la comprensión de la causa de los incidentes. El modelo propuesto por Reason ha alcanzado una gran difusión[vii]. Reason afirma que el ser humano es falible y los errores que comete son esperables. Sin embargo, los errores humanos deben ser vistos como consecuencias, y no como causas, pues tienen su origen en factores existentes en el sistema.
La cultura de seguridad necesita un sistema de información que recoja, analice y difunda la información relacionada con los incidentes. Esta cultura informada necesita a su vez de cuatro subculturas: una cultura de comunicación, en la que el personal perciba un clima de confianza para comunicar los incidentes; una cultura justa, en la que esté claramente diferenciada la conducta inaceptable y que no va a ser tolerada y la conducta que, aunque errónea, es comprensible y aceptada en un sistema de comunicación y análisis[viii]; una cultura flexible, en la que se produzcan alteraciones de la estructura jerárquica para adaptarse a situaciones de riesgo; y una cultura de aprendizaje, caracterizada por el deseo de extraer conclusiones del sistema de información y la disposición a adoptar las reformas necesarias por importantes que sean.
¿Qué es SENSAR?
Sistema Español de Notificación en Seguridad en Anestesia y Reanimación
La Asociación Sistema Español de Notificación en Seguridad en Anestesia y Reanimación (SENSAR) se constituyó el 24 de Enero de 2009 como una entidad sin ánimo de lucro, con los siguientes fines: Promover la seguridad asistencial de los pacientes bajo cuidados médicos en el ámbito de la Anestesiología, Reanimación y Tratamiento del Dolor. Conocer los incidentes que afectan o pueden afectar la seguridad asistencial en dicho ámbito a fin de tomar las medidas necesarias para evitar su repetición. Fomentar la cultura de seguridad asistencial y la práctica clínica en dicho ámbito. Un aspecto primordial de SENSAR es la retroalimentación, es decir las actuaciones que se realizan para que los integrantes de cada servicio de anestesia reciban información de qué incidentes se han comunicado y qué medidas se están tomando.
A nivel nacional, los Administradores SENSAR, elegidos por la Junta directiva de SENSAR, se encargan de la gestión de las herramientas online (ANESTIC, escuelaSENSAR.org, twitter, y SENSAR.org y su página de Facebook)
Junta
Directiva:
- Presidente: Daniel Arnal, Alcorcon
- Vicepresidente 1º: Alejandro Garrido, Madrid
- Vicepresidente 2º (Presidente Saliente): Juan Ignacio Gómez-Arnau, Alcorcon
- Secretario: Adolfo Martínez Pérez, Madrid
- Tesorero: Jose Maria Marzal Baro, Alcorcon
- Vocales:
·
Formación: Marian Santos Ampuero, Madrid
·
Casos
clínicos: Silvia Ramírez,
Alcorcón
·
Boletines: Ángeles de Miguel, Madrid
·
Relaciones
institucionales:
Graciela Martinez Palli, Barcelona
·
Webmáster: Sonsoles Martín, Madrid
·
Acreditaciones:
Maria José García, Granada; Alberto
Martínez Tellería, Granada; Marcial
Rey Martínez, Vigo; Tomas
Rodriguez, Ortuella, Basurto; Maria
Luisa García, Valencia
Entre las actividades más destacada de SENSAR queremos señalar la
celebración del Curso de Formación en Seguridad del Paciente (2ª Edición) avalado por la Sección de Calidad, Ética y Seguridad del
Paciente de la SEDAR y SAR Madrid, el cual pretende servir de introducción a
una visión global del manejo de situaciones de crisis y el aprendizaje de los
errores en el entorno perioperatorio de la anestesia, los cuidados críticos y
el tratamiento del dolor. El objetivo
general es aportar una visión integral, con los factores
de sistema y los componentes humano y de trabajo en equipo, en la aproximación
a situaciones que ponen en peligro la seguridad del paciente.
[i] Runciman
WB: Lessons from the Australian Patient Safety Foundation: setting up a
national patient safety surveillance system -is this the right model? Qual Saf
Health Care 2002; 11: 246-51
[ii] Pronovost
P, Sexton B: Assessing safety culture: guidelines and recommendations. Qual.Saf
Health Care 2005; 14: 231-3
[iii] Ruchlin
HS, Dubbs NL, Callahan MA: The role of leadership in instilling a culture of
safety: lessons from the literature. J Healthc.Manag. 2004; 49: 47-58
[iv] Barach P,
Berwick DM: Patient safety and the reliability of health care systems. Ann
Intern Med 2003; 138: 997-8
[v] Mohr JJ, Abelson HT, Barach P: Creating
effective leadership for improving patient safety. Qual Man Health Care 2002;
11: 69-78
[vi] Hutchinson
A, Barach P: What is the role of healthcare managers in delivering safe care?
Qual Saf Health Care 2003; 12: 161-2
[vii] Reason J:
Human error: models and management. BMJ 2000; 320: 768-70
[viii] Runciman WB, Merry AF, Tito F: Error, blame and
the law in health care - an antipodean perspective. Ann Intern Med 2003; 138:
974-9
[ix] Bartolomé
A, Gómez-Arnau JI, Santa-Úrsula JA, Marzal JM, González A, García del Valle S,
Hidalgo I, Arnal D, Puebla G: Utilización de un sistema de comunicación y
análisis de incidentes críticos en un servicio de anestesia. Rev Esp Anestesiol
Reanim 2006; 53: 471-8
No hay comentarios:
Publicar un comentario